Cada uno de los jugadores de la selección española de fútbol recibirá 600.000 euros (754.000 dólares) en concepto de prima por haber logrado el título de campeón del mundo en Sudáfrica.
La cantidad, muy criticada hace unas semanas en un momento de grave crisis económica, no parecía hoy exagerada en un país sumido en la euforia de haberse alzado por primera vez con el triunfo.
Los 13,8 millones en total (600.000 por 23 jugadores) saldrán de las arcas de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Es decir, se pagarán con recursos propios de la misma, entre otros, los procedentes de los ingresos por publicidad.
La prima prometida a los jugadores capitaneados por Iker Casillases la más alta de las 32 selecciones que aspiraron a convertirse en campeonas en Sudáfrica. A los españoles les seguían Argentina(520.000 euros prometidos) e Inglaterra (470.000).
La cantidad que están a punto de embolsarse es además tres veces más de lo que cobraron en 2008 por proclamarse campeones de Europa en Viena. Y la diferencia con el dinero que los de Vicente del Bosque hubieran obtenido si no hubieran vencido a Holanda en Johannesburgoes también grande: habrían cobrado «sólo» 120.000 euros adicionales si su puesto hubiera sido el de subcampeones.
Cuando en mayo se hizo público el dinero prometido a los futbolistas en caso de victoria, en España se vivió un revuelo. El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, acababa de anunciar un drástico plan de recortes, incluido gasto social y bajada en los sueldos de los funcionarios, para disminuir el abultado déficit público de España. Y la opinión pública y los medios de comunicación se llevaron las manos a la cabeza por la cantidad ofrecida por la RFEF a cada uno de los miembros del equipo.
«Yo también tengo familia, tengo primos, tengo amigos que están sufriendo la crisis. No hay que mezclar una cosa con la otra. Hay muchas cosas de las que se podría hablar pero no se hablan», dijo entonces Casillas, al ser preguntado al respecto en una rueda de prensa.
El debate llegó incluso al Congreso de los Diputados. El Bloque Nacionalista Galego (BNG) exigió una renegociación de la cantidad. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) pidió directamente la supresión de un pago extra por hacer lo que se esperaba de ellos.
Ahora, algunos jugadores podrían donar parte de sus ganacias a obras benéficas. Antes del Mundial, de hecho, se reunieron con algunas ONGs, según dijo en su día Casillas.
La polémica, no obstante, no estaba ya hoy sobre la mesa. «Un buen regalo para el mejor equipo del mundo», titulaba el diario «El Mundo» una información en la que aludía a los 600.000 euros.
