Tareferos de Montecarlo y Oberá levantaron los cortes

La decisión fue tomada luego de una reunión con la vice gobernadora Sandra Giménez. Tras un extenso plan de lucha consiguieron que la Nación deje de retener los beneficios que les corresponden y acceda a extender el subsidio interzafra. Después de una prolongada reunión en la que participó la vice gobernadora, Sandra Giménez, los tareferos de Montecarlo y Oberá levantaron ayer los cortes de ruta que, en forma intermitente, mantuvieron desde la semana pasada. En el intenso período de negociaciones que acompañó a la protesta durate toda la última semana, los trabajadores de la yerba mate, consiguieron que la Anses acatara la orden judicial que los obligaba a dejar de aplicar descuentos sobre las asignaciones familiares que les corresponden a los tareferos y también consiguieron que se eliminaran algunas restricciones en el acceso al subsidio interzafra.
Ayer volvieron a sus casas con la promesa de que el organismo nacional les devolverá todo lo que les fue descontado de manera irregular, aunque todavía no saben cómo van a cobrar ese dinero. El viernes próximo se volverán a reunir con Sandra Giménez en procura de mayores detalles.
Según indicaron los delegados de los trabajadores, desde la Provincia les explicaron que durante toda la semana próxima se reunirán datos para establecer con mayor precisión cuánto se le debe a cada tarefero, información necesaria para continuar con las gestiones.
Si bien los trabajadores dejaron de lado las medidas de fuerza, aseguraron que si la Anses no devuelve lo que les descontó, no dudarán en retomar la protesta con la misma firmeza.
Resultados positivos
En poco más de una semana al borde de las rutas o directamente cortando el tránsito, los tareferos consiguieron lo que no habían logrado en cinco meses de lucha por otras vías y ni siquiera con un fallo judicial en su favor: que la Anses deje de descontarles sus asignaciones familiares.
Además consiguieron que se cambien los requisitos para el acceso al subsidio interzafra: ya no se exigirá que el trabajador acredite un ingreso mensual superior a los 430 pesos para obtener el beneficio, sino que bastará con que haya obtenido 100 pesos de ingreso «en blanco».
En tanto que para el equipo jurídico que acompaña el reclamo, los compromisos formulados por funcionarios provinciales y nacionales no hicieron más que reforzar la postura de los tareferos. «No se puede calificar como un logro que la Anses se haya comprometido a cumplir los fallos judiciales que la obligaban a dejar de descontar las asignaciones, porque se supone que los fallos se deben cumplir, lo importante de esto fue que hubiera un reconocimiento general del Gobierno nacional y de las autoridades provinciales de que la desobediencia judicial no solo es una cuestión penal que se deba discutir en sede judicial, sino también compromete la institucionalidad, sobre todo si el que desobedece es una institución del Estado, como en este caso es la ANSES», destacó Roxana Rivas una de las asesoras legales.