En distintos momentos durante el año, sobre todo en aquellos en que se registra una mayor humedad en el ambiente, nuestras viviendas suelen verse invadidas por insectos como moscas, mosquitos y polillas, que provocan picaduras u otros trastornos. Los repelentes ambientales, líquidos que se evaporan, espirales, tabletas, son controlados por ANMAT. Estas recomendaciones ayudan a realizar mejores elecciones a la hora de adquirir estos productos de uso doméstico.
Los repelentes ambientales son productos destinados a ahuyentar a los insectos, con el objeto de evitar, o por lo menos disminuir, las picaduras o demás inconvenientes que su presencia puede provocar.
Las plagas más comunes hacia las cuales van dirigidos son, en general mosquitos, moscas y polillas.
Están destinados a ser aplicados sobre superficies inertes o para ser liberados desde un punto fijo, volatilizándose de tal manera que se dispersen en el aire del ambiente.
Las presentaciones más comunes son las conocidas tabletas, los líquidos termovaporables (que se volatilizan a partir de un calentamiento eléctrico), los espirales por combustión y los líquidos preparados para ser empleados en antorchas.
Todos estos repelentes de utilización hogareña pueden contener muy diversos ingredientes y se encuentran comprendidos dentro de los llamados productos domisanitarios. No deben ser confundidos con los repelentes de uso personal, que se aplican directamente sobre el cuerpo y son considerados productos cosméticos.
Una de las características básicas de este tipo de productos es que en ningún caso deben contener más de un litro, que es el máximo permitido para plaguicidas de venta libre. Un contenido mayor es un síntoma indubitable de ilegitimidad.
Pero, sin dudarlo, independientemente del repelente ambiental de que se trate, es importante tomar las siguientes precauciones:
Emplearlo en la cantidad adecuada, tal como el rótulo lo indica.
Aplicarlo únicamente en la forma indicada en el rótulo.
Lavarse las manos luego de haber aplicado el producto.
Productos con líquidos que se dispersan en el ambiente
Utilizarlos en ambientes ventilados.
No aplicarlos en presencia de personas asmáticas o alérgicas respiratorias.
Colocar la cabeza a una distancia mínima de dos metros desde el punto donde se está liberando el producto.
En el caso de aparatos eléctricos que llevan líquidos en su interior, tener la precaución de no cubrirlos y no introducir objetos dentro de ellos.
Antorchas con líquidos en su interior
El uso de las antorchas debe ser exclusivamente en exteriores, y nunca en el interior de la casa.
Debido a que estos productos suelen tener solventes orgánicos no acuosos, en caso de ingestión involuntaria o intencional nunca debe intentarse provocar el vómito.
Importancia del rotulado
Es importante que el consumidor preste atención a las leyendas para orientarse acerca de cómo el producto debe ser utilizado, dosificado y también qué hacer en casos de intoxicación.
Esto incluye las exposiciones perjudiciales al producto que, aun sin llegar la intoxicación, puede requerir hacer una consulta al centro de intoxicaciones. Los números deben estar en el rótulo si el producto ha sido aprobado por INAL-ANMAT, es decir, si es legítimo.
El usuario puede consultar en el rotulo, cuáles son los ingredientes activos que son las sustancia que le adjudican el efecto de repelencia al producto. Los más comunes son los principios activos pertenecientes al grupo químico llamados piretroides, aceites esenciales, generalmente aceites de citronela, y en el caso de los productos anti polillas como la conocida naftalina (comúnmente va a estar mencionado el principio activo naftaleno).
También es importante leer detenidamente las precauciones que deben estar señaladas en el rótulo.
Deben figurar los números correspondientes a las siglas RNE, (Registro Nacional de Establecimiento) y RNPUD, (Registro Nacional de Producto de Uso Doméstico). Eso le asegura al usuario que el producto está registrado y, de ser esto veraz, por lo tanto garantizada su eficacia y seguridad ante la ANMAT.
Para verificarlo, puede realizar las consultas correspondientes al Programa ANMAT Responde, cuya línea gratuita 0800 333 1234 funciona durante todo el año.
