El jefe de la Agrupación IV «Misiones» de Gendarmería nacional, comandante mayor, Alfredo Erben explicó que «la desaparición del cabo primero Gustavo Gómez fue una noticia impactante para nosotros por lo que él representaba, fue un profesional íntegro en todo sentido, el trabajaba en la división de policía científica de la fuerza desde el año 2007». Todavía no se sabe acerca de la repatriación de sus restos, se supone que podría ser en un avión Hércules que partió hacia el país caribeño devastado por el terremoto de anteayer.
Asimismo recordó que «él perdió la vida prestando servicio en el edificio del cuartel general de la ONU en Haití, por lo que se encontraba en horario de trabajo al producirse el terremoto y posterior derrumbe del edificio, en el que varias personas perdieron la vida».
Inicialmente los restos tienen que ser repatriados a la ciudad de Buenos Aires y posteriormente llegar a la ciudad de Posadas. Gómez era oriundo de la Provincia de Buenos Aires y hace dos años prestaba servicio en Posadas, donde hacía poco más de una semana había visitado a sus familiares.
En total son 20 los gendarmes que se encuentran en Haití, 6 están trabajando y prestando servicio en elementos de seguridad en la embajada, y los otros 14 integran el contingente de policía civiles de la ONU, que es la misión ejecutiva donde los 14 militares se desempeñan en distintos lugares y actividades que hacen a la organización policial internacional que existe en Haití.
Por último, el alto jefe de Gendarmería expresó en Radio República que el gendarme fallecido «era un ejemplo para todos, porque su trabajo era una vocación de servir y con esas intenciones él salió hacia un país que necesitaba ayuda».
