Ocurrió durante la madrugada de ayer en la zona oeste de Posadas. Eran tres locales que se encontraban en la misma cuadra y ningún vecino vio ni escuchó nada.
La banda de boqueteros ingresó a tres comercios posadeños en la madrugada de ayer, en la zona oeste de Posadas. Sustrajo mercaderías valuada en alrededro de doce mil pesos, pero mayores fueron los daños ocasionados, manifestaron los comerciantes.
Malestar y bronca causó el golpe de los boqueteros en la zona oeste. Los comerciantes lamentaban las pérdidas ocasionadas por los malvivientes que ingresaron por los techos de tres locales para llevarse lo que encontraban a su paso.
Primero habrían ingresado en carnicería «Carlitos», ubicada en avenida Eva Perón casi Blas Parera, donde tras cortar una chapa de zinc y parte del cielorraso sustrajeron 90 pesos que estaban dentro de la caja registradora, una radio, y mercaderías varias, valuadas en alrededor de dos mil pesos.
Al llegar al comercio, la propietaria, Silvina Lidia Dambroski, encontró las mercaderías tiradas y muchas de ellas destruídas, además del boquete en el techo.
La mujer llamó a la comisaría séptima para denunciar el hecho, y minutos más tarde, sus vecinas se encontraron con el mismo escenario al abrir sus locales comerciales.
La más perjudicada fue la propietaria del comercio «Moda fashion», donde los malviviente «desvalijaron» el local, llevándose numerosos prendas de vestir y zapatillas, valuadas en alrededor de diez mil pesos.
La mujer entró el shock al ver su local vacío y con los daños en el techo, los que fueron reparados por los comerciantes en horas de la mañana.
En tanto, en el tercer local, un ciber denominado «Tex», lo boqueteros cortaron las chapas de zinc y sacaron varios machimbres del cielorraso para intentar ingresar al comercio. Sin embargo esta desistieron de la acción al ver el sistema de alarma colocado detrás de la puerta.
«Los daños fueron muchos, y ahora tendré que instalar varios sensores de movimientos», manifestó la responsable del ciber.
Los vecinos del lugar que se mostraron sorprendido por los robos, aseguraron no haber visto nada, sin embargo dijeron que hasta hace pocos días trabajaba un sereno en esa cuadra que cuidaba los locales y el servicio era pagado por todos los comerciantes.
