Por la falta de insumos, ayer dejaron de operar todos los sectores de la planta de pasta celulósica. Los obreros creen que «no hay garantía de la continuidad de la fuente laboral». El viernes se definirá en una asamblea los pasos a seguir. La incertidumbre sobre el futuro de la Pasta Celulósica Piray (PCP), es total. Luego de que el lunes uno de los sectores de la fábrica dejó de operar por falta de insumos, ayer la planta se paralizó totalmente.
El secretario general del Sindicato Papelero de Puerto Piray, Mario Escurra dijo que la empresa PCP quedó sin insumos luego de producir durante cuatro días, y «de esta manera no tenemos la garantía de la continuidad de la fuente laboral».
«Los propios dirigentes de la Federación del Papel no pueden creer lo que está sucediendo en la empresa de Piray. No podemos seguir trabajando de esta manera», agregó.
Escurra dijo que los trabajadores dieron todo para que la empresa continúe trabajando. «Hemos, inclusive renunciado a derechos nuestros haberes perdiendo más de 1.000 pesos mensuales para que la fuente laboral continúe y, tampoco nos están garantizando los insumos para poder producir pasta celulósica».
«Ya pararon casi todos los sectores de la fábrica porque al no haber insumos no podemos seguir produciendo», añadió Escurra, y confirmó que «el viernes pasado cobramos 300 pesos. El compromiso de la empresa es que el próximo viernes nos deben pagar 300 pesos más el 20 por ciento de 900 toneladas de pasta a 450 dólares la tonelada. Es decir nos tienen que pagar 180 toneladas a 350 dólares la tonelada, lo que significa que deben repartir entre los trabajadores 283.500 pesos entre 230 trabajadores, es decir unos 1.250 pesos promedio por empleado».
Pocas expectativas
Respecto a la posibilidad de que haya una solución a corto plazo, el dirigente gremial se mostró poco optimista. «No creo que estos empresarios cumplan con el pago», sostuvo.
«Nosotros estamos demostrando que queremos la continuidad de la fuente laboral pero ellos no nos están garantizando nada. Esto no da para nada. Alguna medida de acción vamos a efectuar ante el incumplimiento de los empresarios».
El gremio se encuentra en asamblea permanente «y ante el incumplimiento cae el acuerdo y deberán responder por nuestro sueldo».
Escurra dijo que «ante esa situación los empleados se están enfermando. Hay muchos problemas familiares. Realmente no entendemos que es lo que quiere la empresa».
Para Escurra la planta está en condiciones de seguir funcionando. «Está para producir 80 toneladas diarias pero se necesitan insumos que no tenemos».
«Es más los cuatro días que producimos salieron dos camiones con materia prima. Según sabemos tienen pedidos de 800 toneladas por un lado y 500 toneladas por el otro».
«No sabemos donde fue a parar el dinero que obtuvieron por la venta de la pasta. Los mismos administradores de la planta son proveedores de insumos y de madera y estamos seguros que ellos están al día. Los que no estamos la día somos los trabajadores», agregó.
El combustible
Escurra dijo que «el sindicato papeleros sostuvo el pago del combustible del ómnibus que nos lleva todos los días a la planta celulósica».
«Nosotros vamos a esperar hasta el jueves si no se hacen cargo de este derecho adquirido vamos a accionar», explicó y agregó que «no se le pagó al empresario del transporte que brinda a los trabajadores».
«Además hace nueve meses que los administradores no hacen los aportes provisionales ni de obra social, ni el aporte sindical desde hace unos ocho meses», sostuvo.
Escurra también cuestionó al presidente de la Cooperativa de Electricidad de Montecarlo, Ricardo Meili, «porque sigue con la política de corte de energía en los domicilios de los trabajadores papeleros».
El dirigente dijo que «no perdemos la esperanza de cobrar nuestros haberes, pero ya estamos iniciando las acciones legales contra Benfide que es el responsable directo porque su presidente Oscar Muiña tiene mucho dinero, ya que cuenta con dos o tres empresas muy grandes en la Argentina y él es el que tiene que responder por nosotros».
Situación «muy compleja»
El directivo de PCP, Hernán Ramírez explicó la complicada situación que atraviesa la empresa, señalando que «se llegó a esta situación porque dejamos de producir. No recibimos cobranzas de las papeleras la semana pasada. Solo recién nos pagaron algo estos días».
Indicó que «en la primera quincena no se produjo casi nada, solo 200 toneladas de pasta. Pero hemos hecho lo imposible para no parar. Se han comprado químicos muy caros»
«Estamos pagando como podemos. No queremos parar la fábrica, por eso hay que pagar a los proveedores. En noviembre y diciembre prácticamente no se vendió nada», agregó.
El directivo explicó que «esta empresa tiene un costo laboral de casi un millón de pesos mensuales. Cuando empezamos hicimos las previsiones y pensábamos que la cuestión iba a ser más fácil. Conocíamos la fabrica, sacamos los cálculos, pensábamos que esto iba andar bien al entrar a la fabrica se iba hacer algunas reparaciones, eso es historia pasada».
Respecto al futuro de la empresa, Ramírez afirmó que habrá que esperar a el asamblea de los trabajadores el viernes, para conocer la postura que tomarán.
«Es una situación muy compleja. Algunos toman como algo simple esto y desconocen un montón de factores que influyen en la comercialización, en la industria, en los costos. No se puede analizar en un nivel tan elemental», consideró el directivo.
«La única perspectiva que tenemos es que si los obreros tienen buena voluntad y tiene ganas de salir adelante, nosotros estamos con ellos. Si no es así, vamos a respetar la decisión de ellos. Si tienen otra alternativa para defender su fuente de trabajo, que nos lo digan, no queremos tener conflictos con ellos», sentenció Ramírez.
