Lo mataron con la daga que utilizaban para los rituales

El pai umbanda Hugo Odilón Ledesma, en cuyo templo ocurrió el crimen.

El pai umbanda Hugo Odilón Ledesma, en cuyo templo ocurrió el crimen.

El médico forense declaró en la segunda jornada del juicio. Explicó que Miguel Ángel Almiron recibió varios golpes con el martillo y el corte en el cuello «aceleró» su muerte.

El ex policía Ellis Gustavo Giersztunowicz, quien traslado la moto de Almiron.

El ex policía Ellis Gustavo Giersztunowicz, quien traslado la moto de Almiron.

César Taurino Klein, dueño del pub donde se vio por última vez a Almiron.

César Taurino Klein, dueño del pub donde se vio por última vez a Almiron.

La segunda jornada del juicio por el homicidio de Miguel Angel Almirón comenzó con la continuación de la declaración del pai umbanda Hugo Odelón Ledesma, quien dijo que el corte en el cuello que presentaba «Chelo» fue realizado con la daga que utilizan para sacrificar los animales en sus rituales religiosos. Además volvió a apuntar a Fernández de Oliveira como el responsable de la muerte.

Por su parte, el médico forense Manuel Acosta que examinó el cuerpo de Miguel Ángel Almirón, explicó que presentaba varios golpes en la cabeza con un martillo de gran dimensión, pero además un golpe de puño que le provocó la pérdida de dos dientes y la rotura del tabique nasal.

Agregó que el corte que presentaba Almirón en el cuello sólo «aceleró» su muerte, ya que los golpes recibidos fueron los que acabaron con su vida.

En tanto, Eugenio Fernández De Oliveira, quien era juzgado por encubrimiento agravado, fue señalado ayer por el pai Ledesma como el responsable de la muerte de Almirón.

Ledesma explicó que ese día cuando fue a buscar los papeles de la motocicleta en cuestión, que los había guardado en una casa con mayor seguridad, se produjo una pelea entre Klein y Almirón, en la cual rompieron varias imágenes del templo, lo que desató la furia de Fernández De Oliveira, quien tomó la maza y mató a «Chelo».

El pai destacó que el tenía prestigio, que entre «sus hijos» había gente reconocida, como funcionarios políticos hasta empresarios renombrados. Dijo además que «no tiene nada que ocultar», y que no teme «realizar un careo» con los demás imputados en el hecho.

Ayer también prestó declaración el hermano de «Chelo» Almirón, quien reconoció que su hermano era esquizofrénico y estaba medicado, pero que el ex policía y el dueño del pub lo incentivaron a tomar bebidas alcohólicas y dejar el tratamiento médico.

Además afirmó que su hermano tenía problemas con la moto, la cual no contaba con papeles.

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