En Misiones, seis de las siete variables tomadas en cuenta para elaborar el Indicador Sintético de Actividad, sufrieron retrocesos en el segundo trimestre del año. La mitad de los distritos está cerca de la recesión, según lo registró el Indicador Sintético de actividad de las provincias (ISAP). Una de las razones fundamentales para este dato es la consecuencia del prolongado conflicto entre el gobierno nacional y el sector agropecuario: por su impacto a los sectores directamente afectados, los problemas de logística y el deterioro en las expectativas futuras.
El ISAP es un índice de actualización trimestral que permite evaluar y comparar de manera homogénea la evolución económica de los 24 distritos argentinas. En términos técnicos, es coincidente del nivel de actividad para cada uno.
El dato resulta de la síntesis de siete indicadores parciales o sectoriales:
– nivel de empleo,
– salario promedio,
– recaudación del IVA,
– ventas de supermercados,
– despacho de combustibles,
– demanda de energía eléctrica,
– patentamiento de autos
Para este período, la confección del ISAP se realizó con una nueva metodología, debido a la pérdida de credibilidad del IPC GBA elaborado por el INdEC.
«Dado que no se avizora una pronta normalización del índice oficial, optamos por reemplazar definitivamente al IPC GBA por el IPC FM&A, un índice de precios de elaboración propia resultante del empalme del IPC GBA con las variaciones mensuales promedio a partir de enero de 2007 (inicio de la manipulación de los índices oficiales) de nueve índices de precios provinciales en los que el INdEC no tiene injerencia», se explica en el informe.
Históricamente, el ISAP nacional mostró una fuerte correlación con el Estimador Mensual de Actividad Económica del INdEC. Sin embargo, en los últimos períodos se abrió una brecha importante entre las variaciones de ambos indicadores.
Es que mientras el EMAE continúa dando cuenta de una economía argentina que sostiene su avance a tasas «chinas», el ISAP Nacional captura la sensible desaceleración que habría sufrido la economía durante el primer semestre de 2008.
«La brecha entre ambos índices se explicaría por la utilización en el ISAP Nacional de un deflactor de las variables nominales que, a nuestro juicio, es una referencia de la evolución de los precios mucho más confiable que la oficial», se señala.
En tanto, el paneo por los ISAP de las distintas provincias indica que la mitad de los distritos -12 sobre 24- registró descensos del nivel de actividad en lo que va del año, es decir, entre el 4° trimestre 07 y el 2° trimestre 08.
«Queremos ser prudentes y esperar a los datos del 3T08 para chequear si se confirma la tendencia, por lo que evitaremos hablar de la caída en recesión de diversas provincias, pese a que técnicamente en varios distritos estarían dadas las condiciones para hacer referencia a ese desenlace», según el documento.
Concretamente, en 14 provincias, al menos tres de las siete variables que componen el ISAP registraron variaciones negativas entre el 4° trimestre 07 y el 2° trimestre 08.
El caso extremo es Misiones, en donde seis de las siete variables sufrieron retrocesos en el período en cuestión. En contrapartida, sólo Santiago del Estero logró escapar sin variables declinantes -lidera el ranking de crecimiento económico en lo que va del año-.
Una posible conclusión es que el conflicto entre el campo y el gobierno
fue un evento sumamente perturbador de la dinámica económica en
todo el país, no sólo por su impacto focalizado asociado a la parálisis
de la actividad rural y sus conexas, sino además por los problemas de
logística y el deterioro de las expectativas macroeconómicas que
tuvieron un alcance territorial mucho más amplio.
Algunas provincias en las que el conflicto rural se hizo sentir con dureza como Chaco, Corrientes, Santa Fe y Buenos Aires registraron caídas sensibles en el nivel de actividad durante la primera mitad del año.
Pero otros distritos en los que la actividad agropecuaria tiene menor peso y estaban alejados del epicentro del conflicto como Santa Cruz, Mendoza y Misiones también sufrieron fuertes descensos en sus respectivos ISAP.
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