Piña dijo que las acusaciones de Martorell son políticas

El ex obispo sostuvo que las revelaciones que hizo Marcelo Martorell respecto al manejo económico de la Diócesis responden a una postura ideológica. Sin embargo no precisó detalles sobre los supuestos desvíos.

Discusión ideológica. Piña pretendió minimizar el informe de Martorell en una pelea política.

Discusión ideológica. Piña pretendió minimizar el informe de Martorell en una pelea política.

La noticia sacudió a los fieles católicos y al ámbito político del país. Hasta medios internacionales reflejaron la denuncia del obispo de Iguazú, Marcelo Martorell, sobre el presunto desfalco en la Pastoral Social y Cáritas de Iguazú, que involucra a Carlos Di Marco y otros dirigentes que rodeaban al ex obispo Joaquín Piña. El informe de Martorell también causó sorpresa en el Gobierno provincial. Distintas fuentes confirmaron que en Eldorado e Iguazú se cerraron merenderos por falta de aportes de la Diócesis de Iguazú, durante la campaña electoral y sostuvieron que en el norte era conocido el manejo que hacían Di Marco y sus allegados de los fondos sociales. Por su parte Di Marco se defendió diciendo en Radio Cataratas que todo está en manos de la justicia.

Fue justamente el ex obispo quien salió a defender a su entorno y alegó «cuestiones políticas» al origen de la información. Pero también deslizó que los señalados por Martorell deberán defenderse en la Justicia.

Ninguno de los demás involucrados contestó los teléfonos de esta redacción para conocer sus posturas.

Para Piña las acusaciones de Martorell tienen como objetivo «subordinar la Iglesia a los intereses de los ricos».

«El obispo Marcelo Martorell vino a destruir todo lo que se había hecho hasta ahora en veinte años, es que ahora, en vez de Iglesia de los pobres vamos a tener la Iglesia de los ricos, con escandalosas alianzas con el poder político y económico», disparó Piña.

En una carta fechada el 5 de diciembre del 2007 el ex obispo había contestado el informe enviado por su sucesor en la Diócesis, Marcelo Martorell, a los obispos presidentes de las comisiones Episcopales de Pastoral Social y Cáritas.

«Evidentemente el informe está hecho desde una posición tomada, que refleja una inquina, que de algún modo se tiene que explicar» comienza diciendo Piña, para denunciar después que este señor, en relación a Martorell, «vino a destruir todo lo que se había hecho hasta ahora, en 20 años… es que ahora, en vez de Iglesia de los pobres, vamos a tener la Iglesia de los ricos, con escandalosas alianzas con el Poder Político y Económico», advierte el ex obispo.

La carta de Piña hace mención además a los vínculos que tiene el nuevo obispo de Iguazú con el gobierno provincial, a quien calificó como del «más corrupto que hemos tenido en la provincia, comprendo que al obispo le molestara el que yo haya dicho: ¿quién es más político, el que hace una denuncia profética contra la injusticia y la corrupción, o el que se alía, (se casa, le chupa las medias) al gobierno más corrupto que hemos tenido en esta provincia?, evidentemente que para sacarle plata, como le sacó, más de 5 millones en la primera entrega», sostiene.

«Duele, sobre todo, el juicio negativo y condena en general de personas, la mayoría de las cuales son muy honestas y respetadas y queridas por todos, a las que se ha difamado, sin ni siquiera pedirles una aclaración. Un mínimo de dialogo», lamentó Piña en la carta y se ocupó después de describir la trayectoria y el compromiso de quienes son mencionados como «delincuentes» en el informe del actual obispo de Iguazú.

Piña defendió el trabajo y la honestidad de Carlos Di Marco, ex titular de Cáritas y Pastoral Social y ex candidato a vice gobernador por el Frente por del Dignidad, «es una grave calumnia decir que se desviaron fondos de Cáritas para la campaña política. No se puede tampoco decir que se mezcló

una cosa con otra».

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