Fue un intento de suicidio protagonizado por Gregorio Juañuk, de 85 años. Es el propietario de «Casa Juañuk». El proyectil se desvió en el paladar y se alojó en el maxilar. El propietario de una reconocida casa artículos deportivos de Posadas, habría superado el riesgo de muerte tras dispararse ayer, en un intento de suicidio, un balazo en la boca ante la presencia de empleados y clientes que se encontraban en su negocio.
El hecho se desencadenó poco después de las 9:30, en el local ubicado en la calle Ayacucho, frente a la plaza San Martín, cuando Gregorio Juañuk, de 85 años, tomó un revólver y se disparó en la boca, por causas que hasta anoche se desconocían.
El octogenario, como habitualmente lo hacía, se había instalado en el escritorio que ocupaba a pocos metros del acceso a «Casa Juañuk» para realizar el rutinario trabajo de control de documentación, facturas y provisión de mercaderías.
Nadie se percató de la actitud de Juañuk, referente de una familia tradicional de la capital misionera, ya que sorprendió a los empleados y a los pocos clientes que a esa hora se encontraban en el negocio, quienes inmediatamente alertaron a las autoridades policiales y al servicio de emergencia de salud.
De acuerdo con la información extraoficial, tras el estampido el hombre se desplomó del sillón que ocupaba en medio de un charco de sangre y permaneció, consciente, hasta que llegaron los paramédicos que lo trasladaron al Sanatorio Boratti.
El suceso que conmovió a la comunidad posadeña, motivó la intervención de las autoridades policiales que cercaron el local, desde la vereda, con el propósito de realizar las pericias correspondientes, trámite que se extendió hasta cerca del mediodía.
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Según las primeras averiguaciones, el disparo que se efectuó Juañuk tuvo un recorrido fortuito ya que, después de impactar en el paladar, el proyectil desvió su trayectoria ascendente hacia el maxilar inferior izquierdo, sin orificio de salida.
En el centro asistencial, se supo anoche en forma extraoficial que el comerciante se encontraba fuera de peligro, en tanto que un médico policial dictaminó un plazo de 30 días para las curaciones, aunque deberá someterse a una intervención para la extracción del proyectil.
Intervino en el hecho, el juez de Instrucción, Eduardo D Orsaneo, quien confirmó que se trató de un intento de suicidio el caso protagonizado por Juañuk, aunque aseguró que continuará las investigaciones a fin de determinar las causas que desencadenaron la actitud del comerciante.
