Lo anunció ayer el presidente de la Legislatura. Se pagará escalonadamente. Pero los empleados rechazaron la oferta y pretenden cobrar todo junto.
[su_note note_color=»#cdcdcd»]Reunión. Blodek recibió a los gremialistas y agrupaciones políticas.[/su_note]El presidente de la Cámara de Representantes, Horacio Blodek, anunció ayer un aumento salarial de una suma fija de 100 pesos más un 18 por ciento escalonado sobre el total de haberes, pagadero en tres cuotas para los empleados legislativos. De ese monto, el 12 por ciento será remunerativo, mientras que el seis por ciento restante no remunerativo ni bonificable.
Pese a que el incremento representa un 30 por ciento más de bolsillo para las categorías más bajas, la propuesta fue rechazada y los empleados amenazan con iniciar un paro si no avanzan las negociaciones. Como contrapropuesta, aceptaron el monto, pero pretenden que todo se cobre desde marzo y no en septiembre.
El incremento representa una erogación de tres millones de pesos anuales en materia salarial para los mil empleados que no recibieron aumentos en los últimos quince años, pese a que en años anteriores, la Legislatura tuvo un presupuesto mucho mayor, como en la etapa de conducción del ahora senador Luis Viana, cuando se superaron los 40 millones de pesos. Muchos de los gremialistas más enardecidos fueron en su momento militantes políticos ligados al justicialismo, que quedaron «relegados» con el paso de los años.
En asamblea, ayer los empleados no aceptaron la oferta salarial y amenazaron con iniciar una huelga, aunque esa idea tampoco tiene demasiado consenso entre los dirigentes gremiales.
«Por primera vez en 15 años, los trabajadores de este poder recibirán un merecido aumento salarial, en un contexto de racionalidad. Sabemos del retraso salarial de los trabajadores, pero las respuestas deben darse responsablemente. Siempre nos gustaría poder anunciar más aumentos, pero no vamos a actuar irresponsablemente, como se hizo en el pasado, cuando se endeudó alegremente a la Provincia para atender sueldos públicos. En esta etapa política, no se puede gastar más de lo que se tiene, como en cualquier casa de familia. No se puede exigir a un Poder del Estado lo que no haría una familia misionera en su propia casa», expresó Blodek a la prensa.
«Esta administración tiene toda la vocación de diálogo que permita ir superando, paulatinamente y de acuerdo a las posibilidades, los obstáculos que impiden desarrollar con mayor eficiencia la tarea en el ámbito de este Poder», puntualizó.
«Después de más de una década y media, nos toca a nosotros empezar a dar las respuestas que otros no dieron, y esperamos poder iniciar así un camino que permita dar mejores condiciones laborales a los empleados legislativos», concluyó.»Después de más de una década y media, nos toca a nosotros empezar a dar las respuestas que otros no dieron, y esperamos poder iniciar así un camino que permita dar mejores condiciones laborales a los empleados legislativos», concluyó.
Algunas agrupaciones aceptaron la oferta
