Cuando se confirmó a Eldorado como sede de la primera fecha del Campeonato Argentino de Motonáutica, los pilotos se prepararon para debutar en un circuito más que complicado. Aquí, dos de los competidores que gozaron y sufrieron lo atípico del Alto Paraná.
Un ejemplo
La única mujer que participó de la competencia de la Copa Macro de Off Shore en Misiones fue la Silvia Sluga. La piloto formó parte de las dos categorías (Sport y Off Shore) que aceleraron sobre el Alto Paraná e hicieron sentir el vértigo a los eldoradenses el pasado domingo.
«En la competencia tuvimos algunos problemas. Corrí en dos series, en la Sport el bote se me hundía, en cada vuelta que daba se complicaba aún más, así que llegar a la final fue todo un éxito y estoy muy feliz por eso. En la Off Shore no supimos que tenía el motor, en la semana vamos a resolver ese inconveniente», afirmó la competidora a sólo minutos de terminada la carrera.
Asimismo, la residente en el Delta de Tigre, es optimista: «De todas formas, lo importante es estar, además esta fecha es la primera del campeonato y vamos a estar más preparados para lo que vendrá», señaló.
El Off Shore es una disciplina de mucho vértigo y velocidad. Los catamaranes duplican la sensación de velocidad dentro del agua con respecto a la tierra, por lo tanto, llegar a 150 kilómetros por hora en el agua es igual a 300 en el suelo, lo que hace aún más riesgoso este deporte.
Justamente, por los riesgos que implica, es muy poco usual que una mujer forme parte de una prueba con estas características. «Les quiero decir a todas las mujeres que quieran ser partícipes de este mundo del Off Shore, que se animen, que es muy bueno, libera muchas energías y adrenalina. Les hace olvidar de todos los problemas. En fin, que se acerquen al agua, no hay que tenerle miedo sino respeto. Tenemos que sentir el orgullo de ser mujeres, sentir que podemos», argumentó Silvia.
Le faltó poco
El otro protagonista de la prueba en aguas eldoradenses fue Norberto Luna, quien lideró las dos primeras mangas y la perdió en la última. «Estuve la vez pasada en Posadas. Ahora en Eldorado la carrera se dio linda, el río corre bastante fuerte, punteé toda la competición pero parece que mi bote sufrió un rasguño, el «Gula» (Gabriel Sivera) me pasó en la última vuelta pero igual estoy contento. Quedé segundo, el bote anda bien y se hicieron algunas modificaciones para que funcione así», comentó Luna mientras se iba para recibir el premio.
Sobre la posibilidad de que se corra nuevamente en la Capital del Trabajo, el conductor de la embarcación C – 111 comentó que «acá estamos muy ansiosos de venir la próxima. Todos estamos contentos, la gente es espectacular, la organización, el recibimiento fue muy bueno así que estamos muy conformes con Misiones. Además, yo había venido anteriormente a chequear el circuito, soy miembro de la Asociación de Pilotos y la ciudad me parece preciosa», afirmó.
Por otro lado, Luna destacó al trazado eldoradense con respecto a los demás, «hay muchos remolinos. Uno viene con el bote «planchado» y la hélice muerde distinto en cada momento por los remolinos. Venía bien en algunos momentos luego se me desestabilizaba por completo. Es un circuito muy atípico y es una prueba para los pilotos porque nunca la podés traer quieta a la embarcación, hay que estar atento a todo los cambios», explicó.
