El jefe de Gabinete, Jorge Franco, dijo que el Concejo Deliberante de Piray «tiene que asumir y poner en juego los mecanismos propios de las instituciones». En un nuevo día de protesta de los asambleístas que reclaman la renuncia del intendente de Puerto Piray, y quienes decidieron cortar ayer la ruta 12 por tiempo indeterminado, provocando la irá de muchos ciudadanos que transitaban por la zona del conflicto; el jefe de Gabinete, Jorge Franco, sostuvo que el Gobierno provincial «respeta las autonomías municipales» y que ante la crisis que vive Piray, el Concejo Deliberante «tiene que asumir y poner en juego los mecanismos propios de las instituciones», señalando que «corre por cuenta de los concejales lo que decidan».
Franco subrayó además, que el Gobierno respeta también la decisión del Superior Tribunal de Justicia (STJ), respecto a que no avaló las tres destituciones del intendente, Nelson Melgarejo, por parte del Concejo; Y recalcó en Radio Libertad y LT 4 que «cada dirigente debe hacerse cargo de la responsabilidad que le corresponde para mantener la paz social de la comunidad. Actuando cada uno con la responsabilidad que le cabe en esta hora, pensando en el bien común».
Por su parte el alcalde ratificó que su dimisión al cargo «está sujeta a la renuncia de los tres concejales, e incluso de los suplentes». Al tiempo que reclamó la participación del Gobierno provincial «para resolver el conflicto».
Melgarejo sostuvo que no desconoce ni niega que «existen dificultades. Pero creemos que los concejales son tanto o más responsables que yo, de todos los problemas que tiene el municipio», en referencia a la presidenta del Concejo Deliberante local, Liliana Barrios, y a los ediles Darío Mareco y Ángel Rivero; acusándoles de «la negativa y la resistencia que pusieron al momento de aprobar el presupuesto para el municipio, en los últimos años».
El alcalde fue más allá y desafió a los tres ediles expresando que «firmaría ya mismo mí renuncia, pero si los concejales tienen el gesto de grandeza de reconocer que ellos también tuvieron plena responsabilidad por su acción».
«Nadie me puede venir a exigir una renuncia y mucho menos estos concejales que están también cuestionadísimos», reclamó.
El jefe comunal manifestó que «me gustaría que recojan la opinión generalizada de la gente, del pueblo que coincide plenamente con mí propuesta. Y si se hizo mal las cosas, nos vamos todos. Pero que no me quieran hacer pagar solo a mí los platos rotos».
Los asambleístas expresaron contundentemente que la situación «está perdiendo el control y nosotros estamos comenzando a perder la paciencia».
Pedido
El intendente de Piray dijo que agradece y reconoce la postura del Gobierno «de no inmiscuirse en los asuntos municipales», pero «si la gente ya no le tiene más confianza a sus representantes (en alusión a su persona), el Gobernador Carlos Rovira debe designar a una persona para que venga a reestablecer el orden institucional». De esta manera el cuestionado alcalde reclamó la intervención del Gobierno en el conflicto.
«Intransigente»
