La Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA) rechazó hoy el proyecto de ley de presupuestos mínimos de protección ambiental para los bosques nativos, por considerarlo «transitorio», y reclamó «políticas de largo de plazo» para el desarrollo del sector.
La Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA) rechazó hoy el proyecto de ley de presupuestos mínimos de protección ambiental para los bosques nativos, por considerarlo «transitorio», y reclamó «políticas de largo de plazo» para el desarrollo del sector.
Además, desmintió «de manera rotunda» las versiones acerca de su participación en la conferencia de prensa que realizaran esta semana el titular del bloque justicialista de diputados, Agustín Rossi, y el legislador Miguel Bonasso, anunciando el compromiso oficial de tratar en la primera sesión ordinaria de 2007 el proyecto de ley de bosques.
«FAIMA integra a veintitrés cámaras empresariales de todo el país pero no ha sido convocada para participar ni del armado de dicho proyecto ni de las modificaciones que actualmente se intenta realizar», subrayó la entidad a través de un comunicado.
Según el texto que fuera aprobado en comisión legislativa de manera general en diciembre último, el proyecto establece la restricción en forma total para el desmonte o la tala rasa de bosques nativos hasta tanto las provincias no desarrollen un ordenamiento forestal que indique claramente el aprovechamiento permitido para cada territorio.
