Dijo que está preparado para competir en las elecciones del año que viene, pero que no es tiempo de hablar de candidaturas. En Alem, pidieron que se postule
Preparado. Sartori se siente con condiciones para pelear una candidatura.
«Mi mayor anhelo es dirigir los destinos de ésta provincia», reconoció el diputado justicialista Diego Sartori, quien sin embargo consideró que es pronto para hablar de candidaturas. Contó que el domingo en una reunión de 500 dirigentes en Alem le pidieron que se postule para gobernador del 2.007, pero dijo que todavía hay tiempo.
El diputado nacional aseguró que «tiene diferencias políticas con Ramón Puerta» porque el ex gobernador está alejado de Kirchner, en cambio Sartori se considera «cercano» al Presidente.
Sartori sostuvo que «hay que analizar qué pretenden los misioneros, pero «estoy preparado para todo, incluso para ser Gobernador si la gente me lo pide, como también para que me digan has cumplido un ciclo». Por otra parte Sartori indicó que trabaja para que el justicialismo en Misiones que sigue intervenido esté en las mejores condiciones y que pueda competir en las elecciones del 2.007, involucrando a todas las partes.
Mesa de lanzamiento
El domingo se realizó un cónclave político en las instalaciones del club Alemán de Alem, en el cual estuvieron más de 500 personas provenientes de distintos puntos de la provincia. Todo hacía suponer que Sartori haría su lanzamiento como candidato a gobernador en una nueva etapa en su vida política. Para sorpresa de propios y extraños aclaró que «esta no es una reunión de lanzamiento de mi candidatura» asegurando además que «es para despedir el año y que se merecen todos los que forman parte de mi equipo de trabajo, que no todos pudieron asistir». Los dirigentes analizaron la situación partidaria y el rumbo que marcó el 29 de octubre pasado. Pero el punto de coincidencia se centro en la necesidad de «un recambio dirigencial y la alternancia en el poder».
Ahora Diego fue la consigna de los dirigentes y militantes que asistieron a la reunión de camaradería. Los comensales provenían de distintos puntos de la provincia lográndose con esto que «todos los municipios estén representados, salvo contadas excepciones que por distintos motivos no pudieron llegar».
Muchos dirigentes hicieron uso de la palabra y realizaron distintos análisis de la situación partidaria y el rumbo que marcó el 29 de octubre pasado.
Pero el punto de coincidencia se centro en la necesidad de «un recambio dirigencial y la alternancia en el poder».
Si bien no se trataba de un lanzamiento de candidatura a gobernador, no faltó quien instara al dirigente político a «hacerse eco de la necesidad que tiene el justicialismo misionero del recambio dirigencial y conducirnos hacia una victoria el próximo año», destacó Alberto Penayo.
En tal sentido instaron al diputado a «seguir trabajando por la reconstrucción del partido y el cambio que necesita Misiones».
Mientras que, aludiendo a las elecciones del próximo año, dijeron «es el candidato a gobernador que necesita el justicialismo para cambiar la historia de la provincia», sostuvo María Teresa Espinoza.
En el cierre de la reunión Sartori explicó que «llegué a la banca de diputado nacional con el voto de los misioneros, y mi prioridad es trabajar por las cuestiones que son de los misioneros».
Por eso en la reunión «participan hoy mi familia, para que sean testigos del compromiso que asumo delante de ustedes» y tiene ver con trabajar para «que se termine la provincia de los oportunistas que se olvidan de la gente».
Propició «la verdadera justicia social como política de estado» porque «es tiempo de recuperar la dignidad de los misioneros».
Aseguró además que «con el apoyo de todos ustedes un verdadero cambio en la provincia es posible, pero solo con honestidad y trabajo se puede cambiar esta realidad».
Agregó además que «tenemos que reivindicar los valores de la democracia y ser respetuosos del voto popular», propicio el acompañamiento de la política nacional que lidera Néstor Kirchner «como lo vengo haciendo desde que asumió como presidente».
Se dice que «para un peronista no debe haber nada mejor que otro peronista, y yo digo también que para un misionero no debe haber nada mejor que otro misionero» concluyo Sartori.
