Más de 30 profesionales reanudaron los talleres en el Centro de Rehabilitación del Ciego «Santa Rosa de Lima». El Centro de Rehabilitación del Ciego «Santa Rosa de Lima», reanudó sus actividades bajo la coordinación de 30 profesionales y la concurrencia de más de 70 alumnos. Entre los servicios que se brindan a la comunidad se destacan los talleres de carpintería, cerámica, encuadernación, informática y orientación vocacional. También se brinda atención a niños discapacitados visuales en su primera infancia, teniendo en cuenta distintos momentos de su desarrollo mediante estimulación temprana y psicopedagogía inicial respectivamente. Se cuenta con un área específica de actividades de la vida diaria como ser orientación, movilidad y psicomotricidad a los efectos de que la persona logre grados de independencia mínimos necesarios que le permitan resolver problemas básicos de su vida cotidiana.
Insistir con la prevención
Luis César Viarengo, director de la institución y Liliana Garayo, profesora de Atención Inicial comentaron sobre la importancia de la prevención y toma de conciencia de comunidad en general sobre los problemas relacionados con la pérdida o disminución de la visión.
«Tratamos de brindar un servicio que sea amplio y útil tanto para la persona con alguna dificultad en la visión como para su entorno. Atendemos a niños y también a sus padres aconsejándolos y guiándolos para que la discapacidad no sea un impedimento para que el chico se desarrolle como persona», dijeron.
Según Garayo, lo esencial es que se estimule al pequeño dado que se han presentado casos de niños de 5 años que no han desarrollado capacidades motoras o que no pronuncian palabras.
«La idea es que las personas aprendan a desenvolverse de la mejor manera posible y es una cuestión que debe ser atendida en conjunto», explicó.
Para Viarengo lo importante es poder brindar las herramientas para que las personas tenga la suficiente autonomía para desenvolverse solos.
«Hay dos tipos de afecciones que se nos presentan. Por un lado las personas no videntes y por otro las que por problemas de salud o accidentes han perdido total o parcialmente la visión. Se aplican estrategias de aprendizajes y se rehabilita a los que tienen que transformar sus hábitos», sostuvo el titular del organismo.
El Centro funciona de lunes a viernes de 8.30 a 11.30 y de 14.30 a 17.30 en las oficinas de la calle Sarmiento 1847 y para los que deseen colaborar con las actividades existen talleres voluntarios de lectura donde se colabora con los que no han sido traducidos al sistema Braile.
Sugerencias
Existen algunas cuestiones a tener en cuenta a la hora de colaborar con una persona ciega. Entre ellas se sugiere que si se le entrega dinero se debe especificar de cuánto se trata, también que al establecer conversaciones se debe y avisar cuando se uno se retira para evitar inconvenientes. Por otro lado si se encuentra en la parada de colectivos con alguna persona con bastón blanco o verde (que es utilizado por personas de baja visión), pregúntele qué linea de colectivo desea tomar y trate de colaborar cuando éste suba al transporte. En caso de que alguna persona le pregunte sobre alguna dirección, sea preciso en cuanto a la cantidad de calles que debe cruzar y de existir giros indique según izquierda o derecha para evitar malos entendidos.
