El Koyak le pelea a la vida manejando un taxi

Como no son muchas las peleas que tiene, decidió comprar un auto para mejorar sus ingresos. Oriundo de Adrogué, Buenos Aires, el boxeador se afincó en Misiones y va desde el ring al auto todos los días.

Uno de los referentes del actual boxeo misionero, el Koyak Ríos, pasó de los guantes al volante de un taxi.
Es que tratando de encontrar alguna entrada económica más segura y estable decidió comprarse un coche para poder sustentar los gastos que le demandan los entrenamientos para cada pelea ya que no recibe ninguna clase de ayuda extra, como para solventar los gastos de su preparación física.
El boxeador nació en Adrogué provincia de Buenos Aires y desde muy chico, cuando apenas tenía 4 años, vino a radicarse a Misiones.
Fue su padre el que lo trajo a la tierra colorada. Mientras tanto, x su mamá le había enseñado los primeros pasos en la vida.
Actualmente Ríos está casado «con una excelente mujer, Natalia Pamela Maidana, la cual me ayuda siempre en todo. Está conmigo en las buenas y en las malas, y eso es lo que cuenta, es muy importante tener un sostén y una contención, y ella me da todo eso. Además de mucho amor» expresó muy emocionado.
Por otra parte el Koyak nos dijo que el auto lo compró después de haber ganado un par de peleas importantes, las que le dieron la posibilidad de adquirir el coche. «Mira la verdad que tener este coche me costo mucha sangre y sudor. Ya que tuvo que ganar tres peleas muy duras, contra profesionales muy bien entrenados, pero bueno ahora uno lo disfruta, y parece que valió la pena», indicó. Y agregó que «los tres combates que tuvo que superar fueron: una en San Pablo, Brasil, la otra en Chile, y la última acá en Posadas».

Un día del Koyak
Se levanta muy temprano a entrenar. Luego de la práctica matutina desayuna y para las 6:30 sale con el taxi a trabajar hasta las 13:30. Almuerza algo liviano e inmediatamente entrena hasta las 15:00. Y a las 15:30 más o menos nuevamente se sube al coche hasta las 21:00.
Al respecto Ríos manifestó que «no es nada fácil llevar una vida de este tipo, es muy sacrificada. Pero bueno cuando uno tiene un objetivo, lo que quiere es llegar a ello». «Pero a pesar de todo este sacrificio, me siento muy contento y alegre, y por supuesto que muy agradecido. Además hasta donde llegué lo hice solo,nadie me ayudó».

Tiempo libre
En sus tiempos libres el Koyak aprovecha para dedicarle a su esposa y a su hijo Victor, ya que entre semana los momentos familiares son escasos. «Los fines de semana son para la familia y para los amigos. Es muy lindo poder compartir un asadito con las personas que uno quiere, además es como un inyección como para empezar la semana con las pilas cargadas», dijo.
Finalmente contó que están esperando un hijo para octubre «con Nati estamos ansiosos, no vemos el momento de que llegue Máximo», expresó Koyak Ríos.


Banderita y guantes

A pesar del trabajo con el taxi, el Koyak Ríos continúa entrenándose muy duro para las próximas peleas que tiene programadas para el resto del año.
Hasta el momento Ríos lleva disputadas 64 peleas, de las cuales perdió nada más que cuatro. Una en amateur, y tres como rentado, según nos dijo.
Actualmente se encuentra entrenando muy duramente. «Los trabajos que estoy efectuando en estos momentos son totalmente de fuerza», dijo.
Koyak comenzó a boxear después que unos amigos de la infancia le insistieran para que incursionara en este deporte. En relación a este tema el boxeador manifestó que «todo empezó porque yo peleaba mucho en mí adolescencia, y mis amigos me dijeron che Víctor te defendés bien porque no prácticas boxeo». «Así fue que hoy me encuentro luchando, y la verdad que no me arrepiento, porque con el boxeo obtuve muchas cosas».
Finalmente Víctor «Koyak» Ríos señaló que «la vida de un boxeador no es tan fácil, es muy sacrificada, pero bueno es la profesión que elegí y en la que seguiré hasta que pueda», concluyó.

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