Un grupo de médicos del Hospital Madariaga comenzará el 1° de julio un trabajo sobre la «Prevalencia del síndrome metabólico y su relación con los factores de riesgo» en 500 jóvenes de la EGB3 y el Polimodal. Médicos que desempeñan sus labores en el Hospital Madariaga, realizarán un estudio a 500 adolescentes de la EGB 3 y el Polimodal de Posadas, para obtener datos sobre el síndrome metabólico, a los efectos de recabar información que servirá para prevenir la proliferación de enfermedades cardiovasculares o la diabetes. El proyecto resultó ganador de la Beca de Iniciación «Ramón Carrillo / Arturo Oñativia» que otorga la Comisión Nacional de Programas de Investigación Sanitaria (CONAPRIS), compitiendo por un espacio en un grupo que reunía proyectos del conurbano bonaerense y todo el interior de la Argentina. Con la financiación que tendrá el proyecto, es la primera vez que la Provincia de Misiones accede a estas becas que anualmente otorga el Ministerio de Salud y Ambiente de la Nación.
Bajo el nombre «Prevalencia del síndrome metabólico y su relación con los factores de riesgos asociados con el estilo de vida en adolescentes de Posadas», el estudio de investigación comenzara a ejecutarse el 1° de Julio y se extenderá un año para lo cual los profesionales involucrados contaran con un subsidio de 15.000 pesos.
La novedosa propuesta de investigación fue elaborada por el Grupo de Estudios Interdisciplinarios de Factores de Riesgo Aterogénicos en Misiones (GEIFRAM) integrado por doce profesionales que se desempeñan en el Ministerio de Salud Publica, varios de ellos también docentes de la Universidad Nacional de Misiones, y cuatro estudiantes de las carreras de Bioquímica y de Enfermería de la UNAM.
Tarea preventiva
El director del proyecto, es el bioquímico Williams Pedrozo y explicó que el síndrome metabólico es una asociación de anormalidades clínicas y bioquímicas que se diagnostica cuando una persona acumula tres de los siguientes parámetros: obesidad abdominal, presión elevada y en la sangre, bajos índices de HDL (colesterol bueno), triglicéridos (grasas aumentadas), y/o glucosa (azúcar) elevada. Este cuadro termina desencadenando la diabetes tipo II y factores de riesgo aterogénicos (enfermedades cardiovasculares) en la edad adulta. Afirmó que la idea es trabajar con chicos que a su vez se conviertan en agentes multiplicadores en materia preventiva.
Modalidad
Si bien la propuesta de investigar en profundidad el tema tuvo como antecedente el trabajo con los empleados públicos, donde se descubrió que más del 25 % padecía el síndrome metabólico, – uno de cada cuatro adultos – el proyecto se focalizará en estudiantes de 11 a 18 años de ocho escuelas de Posadas «ya que si el síndrome metabólico es tratado a tiempo podemos estar previniendo la aparición de esas enfermedades lo cual a su vez está muy vinculado con el cambio en el estilo de vida y alimentación de los adolescentes», explicó Pedrozo. Y añadió que se trabajará tomando una encuesta personal y nutricional a los alumnos, una a sus padres para evaluar historia familiar de enfermedades cardiovasculares o diabetes tipo II, se tomarán los datos antropométricos (peso, altura, circunferencia de cintura), presión arterial, extracción de sangre que será realizada con previo consentimiento de los padres y los análisis entregados en forma gratuita a las 48 horas, con charlas educativas con los padres y alumnos a cargo del equipo investigador.
