Convenio de Facultad de ingeniería y la Federación Misionera de Cooperativas de Agua Potable. La casa de altos estudios realizará estudios para mejorar la calidad del vital líquido. Investigaciones realizadas en el año 1998 determinaron que los arroyos mas contaminados eran el Mbotaby y el Tubichá, no aptos para el consumo.
Oberá. La Facultad de Ingeniería de Oberá firmó un convenio de colaboración mutua con la Federación Misionera de Cooperativas de Agua Potable (FEMICAP) a través del cual la institución educativa realizará trabajos para mejorar la calidad del agua.
El convenio firmado el viernes en la localidad de Ruiz de Montoya, donde se efectuó la reunión habitual de la institución también prevé la entrega casi inmediata de trabajos de investigación que ya ha realizado la entidad, en cuanto a salud y fluorificación de agua potable.
Según Rubén Gómez, vicedecano de la Facultad de Ingeniería «nuestros trabajos ya realizados tienen que ver con el mejoramiento de las aguas que consume la población ya sea mediante trabajos de control o con la dosificación de flúor que se hizo por ejemplo en Oberá, con la Celo (Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá) y el Círculo Odontológico que incluso se aplica actualmente».
Agregó que «la facultad aportará material humano y de investigación científica y la FEMICAP nos dirá que controles o análisis quieren hacer, se trabajará sobre las características del agua de cada una de las Cooperativas y como mejorarlas, eso lo determinará la FEMICAP pero desde ya se puede trabajar en conjunto porque el acuerdo así lo permite», precisó Gómez.
Hace varios años, aproximadamente en el año 1998 y también en la anterior gestión, junto a otras instituciones, se trabajó en la limpieza de arroyos de la ciudad sobretodo con la eliminación de letrinas a la vera de los arroyos, pero luego no se continuó con la modalidad por lo que la contaminación de los arroyos nuevamente es real.
De acuerdo a ese estudio efectuado por la Facultad en el año 1998 los arroyos mas contaminados en esta ciudad eran el Mbotaby y el Tubichá, no aptos para el consumo humano, la higiene y el lavado de ropas.
No obstante, actualmente, cientos de familias utilizan esta agua para limpieza y lavado de ropas y la concienciación sobre la contaminación no existe.
