Equilibrio público y privado

El debate político se centra en el empleado público y los privilegios de un sector que no paga sus impuestos. ¿Se puede reclamar si no se contribuye? Los partidos tienen cada día menos contención.

El estatismo mal entendido. La Provincia está asistiendo por estos días a un debate económico que termina afectando a toda la sociedad, pero que apunta al beneficio de unos pocos por sobre el del conjunto. Un grupo de legisladores pretende beneficiar a los empleados públicos -no más de 35 mil- con aumentos de sueldos, adicionales y devoluciones de recortes salariales sin contemplar si existen o no los recursos necesarios para ello. Es cierto que los recortes salariales fueron injustos y en algunos casos confiscatorios, pero se llegó a ellos porque el Estado no podía sostenerse más sobre sus pies. Pero en toda la crisis, los empleados públicos mantuvieron sus puestos, sus vacaciones y su obra social, a diferencia de miles que perdieron sus trabajos o sus empresas. ¿Se puede cuantificar cuánto habría que devolverle al sector privado por las malas políticas aplicadas en el pasado? Esos mismos diputados aprobaron el endeudamiento de la provincia que hoy debe sostener con los recursos generados por la recaudación o la coparticipación de impuestos, pero a la vez, pretenden que se bajen impuestos para beneficiar a los privilegiados que en la década pasada no aportaron dinero para sostener al Estado. Empresarios que hoy eluden sus compromisos fiscales, pero que se quejan a viva voz de la presión fiscal. ¿Se puede uno quejar de “altos impuestos” si no los paga? Buenos Aires tiene un caso testigo: el periodista Mariano Grondona cuestiona cada domingo las políticas oficiales para combatir la inseguridad, pero figura en una larga lista de ricos y famosos que no paga sus impuestos con los que solventar una mejor policía. ¿Tiene autoridad moral para pontificar desde la TV? El otro caso saliente es el de Juan Carlos Blumberg, el padre de Axel, un empresario que pide mano dura, pero que no cumple con sus obligaciones tributarias. En Misiones también hay una larga lista de ricos y famosos que no paga sus impuestos como debería. 300 de ellos deberán ir a la Justicia por evadir o eludir 20 millones en gravámenes. Si todos cumplieran, es muy posible que pueda pedirse una rebaja, porque la recaudación sería mucho mayor, pero la economía provincial maneja entre cuatro ó cinco mil millones de pesos en negro. Con esos datos, ¿es justo que el Estado deba beneficiar a ambos sectores en detrimento de la producción y las inversiones? Las quejas de los empresarios y las distintas voces que hablan de un “éxodo industrial” hacia destinos más favorables no tienen en cuenta otro dato de la realidad:Misiones terminará el año entre las diez provincias que más inversión recibieron en el año. No vendrían inversiones si las presiones fueran tan altas. Una encuesta que recorre los círculos de poder revela que el principal reclamo de los misioneros es la creación de puestos de trabajo, seguridad, salud y educación. En ese orden. La devolución del recorte salarial, aún en Posadas, donde vive la mayor parte de los empleados públicos no aparece como la prioridad. Ese mismo sondeo -sobre 2.500 casos- muestra una muy pobre imagen legislativa y una mejor de los distintos poderes ejecutivos.negrita/Construcción política/negritaEl 2005 se avecina como un año político, pero que tendrá ribetes aun más duros que los del año pasado y de este. La oposición ratificó a sus caciques preparados para la batalla electoral legislativa, donde tienen mucho más que perder que el oficialismo. Es lógico entonces que sus embates se hagan cada vez más incisivos. Cualquier tribuna sirve para cuestionar: ayer el diputado Luis Viana, conductor de los partidos opositores, usó la fiesta del deporte -organizada por un medio colega- para cuestionar al Gobierno por no apoyar a los atletas. Pero el discurso fue interrumpido por una señora que recordó que él tampoco aportaba. La estrategia de la oposición es clara, pero más allá de la dirigencia visible y mediática, no parece calar hondo en sus propios partidos. El intendente de Puerto Iguazú, Claudio Filippa, abandonó el justicialismo y se sumó al Frente Renovador en busca de “gestión”. No se sentía contenido, dijo después de salir de la reunión realizada en la Jefatura de Gabinete al mando de Maurice Closs. Otros ya habían hecho lo mismo tiempo antes con argumentos muy parecidos.negrita/Ladrillo sobre ladrillo/negritaHoy se inaugurará un fuerte plan de viviendas en Garupá con inversión de la Entidad Binacional Yacyretá. El año que viene se pondrá en marcha otro plan de 2.900 viviendas con aportes de la Nación y la provincia por 161 millones de pesos. Casi cuarenta empresas podrán trabajar y crear puestos de trabajo para casi 20 mil personas durante el año que viene. La obra pública aparece como elemento dinamizador de la economía, más allá del aporte privado. El turismo y la forestoindustria aparecen como los otros puntales que hacen de la provincia una de las que más atrajo inversiones este año. Ese debería ser el eje de la política entre oficialismo y oposición si hubiera madurez democrática: el que gana gobierna y el que pierde acompaña. El sector privado y el público deberían coincidir en las estrategias para repartir cargas y beneficios en forma equitativa, sin privilegios de uno sobre el otro.

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