Crimen del Yabebiry: el abogado del policía imputado pidió la nulidad de la requisa del auto

En esa oportunidad se secuestró la pinza con que se cortó el alambre utilizado para atar la máquina de escribir al cuerpo de Lorena Basabes. Esto demorará el procesamiento del único sospechoso que tiene el caso. El crimen se descubrió el 4 de mayo, cuando un pescador encontró el cadáver en el arroyo Yabebiry Tras finalizar la feria judicial de invierno, el abogado José Alberto Tuvi desembarcó en el Juzgado de Instrucción 3 para pedir la nulidad de la requisa del auto del agente de Policía Javier Castillo, quien se encuentra detenido desde hace más de dos meses por el homicidio de su concubina, Lorena Basabes. La joven mujer fue arrojada desvanecida al arroyo Yabebiry a mediados del mes de abril pasado y su cuerpo apareció casi tres semanas después, en total estado de descomposición. El defensor de Castillo advirtió ayer a través de un escrito que la requisa del rodado se realizó sin que se notificara a la fiscal Amalia Spinnato ni a la defensa, lo cual derivaría en una nulidad del acto, ya que «es irreproducible», de acuerdo con lo manifestado por el letrado. El procedimiento lo realizaron el 17 de mayo pasado efectivos de la Seccional Tercera, lugar donde está estacionado el Volkswagen Gacel de Castillo. Este vehículo habría sido utilizado para transportar a Basabes hasta el lugar donde fue arrojada al agua junto con una máquina de escribir inventariada por la Jefatura de Policía. En dicha requisa se secuestró una pinza que, de acuerdo con la conclusión de los peritos de la División Criminalística, sería la misma que se utilizó para cortar el alambre usado para atar al cuerpo la máquina de escribir que había sido sustraída del Destacamento policial Aeroclub, en Posadas. El juez de Instrucción Eduardo D’Orsaneo analizará durante esta semana la presentación de Tuvi. El abogado adelantó que en el caso que el magistrado no haga lugar a su pedido, recurrirá a los tribunales para apelar la decisión. Para el letrado el juez debe hacer lugar al planteo ya que existe jurisprudencia a nivel provincial donde incluso en pleno juicio oral se hicieron caer valiosas pruebas por tener vicios de nulidad similares al denunciado. Por otra parte, el defensor dijo que en los próximos días solicitará una ampliación de la indagatoria de su cliente. En realidad sería la primera vez que el agente de Policía se prestaría a responder las preguntas del juez D’Orsaneo. El único sospechoso que tiene el caso daría su versión de los hechos y negaría cualquier vinculación con la muerte de su concubina. Cabe señalar que todavía resta conocer la decisión del Tribunal Penal 1 sobre qué juzgado debe investigar el caso. Por la fecha de comisión del delito le correspondía al juez Ramón Grinhauz, pero éste fue recusado sin causa por Tuvi. Para ese entonces, la defensora oficial ya había solicitado el apartamiento del juez Horacio Gallardo –el primero en intervenir en el caso- sin expresión de causa. El juez D’Orsaneo sostiene que su colega Grinhauz tendría que haber rechazado el planteo de la defensa y continuar investigando el hecho. Desde hace un tiempo se limitó las recusaciones sin causa en la Justicia misionera. Ahora cada imputado puede hacerlo en una oportunidad, pero Tuvi dice que en realidad es una vez por cada abogado que patrocine al imputado. MACABRO HALLAZGO El pasado 4 de mayo, en horas del mediodía un pescador halló en el paraje «La Pilincha», en aguas del arroyo Yabebiry el cuerpo de una mujer en avanzado estado de descomposición. La bajante del agua hizo que el cuerpo de Lorena Basabes –estaba embarazada de ocho meses- quedara semidescubierto. Cuando los bomberos quisieron retirar el cadáver, notaron que estaba amarrado a algo: era una máquina de escribir que tenía un número de inventario y las iniciales JP (Jefatura de Policía). A través de este detalle se llegó hasta el presunto autor del hecho: el agente Javier Castillo, quien prestaba servicios en la Seccional Tercera y unos meses antes estuvo en el destacamento Aeroclub, en lugar donde desapareció la máquina. El policía está detenido en la Alcaidía de Prevenidos desde el pasado 5 de mayo. Pese a que no hay pruebas directas en su contra, la Justicia ya tendría suficientes indicios como para dictarle el procesamiento por homicidio.