Temores en el Mercosur

Brasil vislumbra el resurgimiento de las disputas comerciales con Argentina, sobre todo con relación a la comercialización de azúcar y pollos en el MERCOSUR. Brasil vislumbra el resurgimiento de las disputas comerciales con Argentina tras las posiciones oficiales comunicadas esta semana por ese paÍs al Ministerio de Relaciones Exteriores brasileño, sobre todo con relación a la comercialización de azúcar y pollos en el MERCOSUR. Así lo adelantaron fuentes diplomáticas brasileñas, que indicaron que la posición oficial de este país será anunciada la próxima semana por el representante presidencial para los asuntos del MERCOSUR, José Botafogo. Según esas fuentes, Argentina ha decidido no tener representación en el Organo de Solución de Controversias del Mercosur, que, a pedido de Brasil, deber conocer las restricciones a la comercialización de pollos brasileños en el mercado argentino. Brasil advirtió que si en esta instancia no logra el fin de las restricciones, acudirá a la Organización Mundial de Comercio (OMC), que, accionada por Argentina, emitió el año pasado un fallo favorable a su socio sobre trabas a la comercialización de textiles. Argentina también entregó en las últimas horas del viernes a Brasil «una propuesta parcial» sobre la inclusión del azúcar en el régimen de libre comercio del MERCOSUR, que debe regir para ese producto desde el 2001, pero que Buenos Aires aplazó unilateralmente hasta el 2005. Según esa propuesta, que un grupo «ad hoc» del MERCOSUR dio a conocer formalmente en una reunión prevista en Brasilia para el próximo día 25, Argentina exige que Brasil acabe con los subsidios que otorga a sus productores de caña, como condición para que entre en vigor el arancel cero para el producto. Botafogo declaró la semana pasada que «hace prácticamente diez años que el Gobierno brasileño se viene retirando progresivamente de la política de gran interferencia en el sector» y que «hoy esa intervención es mínima», limitada a zonas del empobrecido nordeste del país y que concluir en el 2003. Con ello, sostuvo entonces Botafogo, «está demostrado que el argumento repetido insistentemente por parte de nuestros socios (Argentina, Paraguay y Uruguay) ya perdió toda sustancia». Fuente: MERCOSUR