Confirman que bajan impuestos a créditos y suben a TV por cable

El IVA a los canales pasaría del 10,5 al 14,5 por ciento en el 2001 y llegaría al 21 por ciento en el año 2002. José Luis Machinea confirmó ayer la idea del gobierno de elevar gradualmente la alícuota de IVA sobre la televisión por cable a 21%. «Habrá reducciones de algunas exenciones impositivas. Lo estamos analizando, pero si se llega a hacer algo de esto va a ser en forma gradual», dijo ayer el ministro confirmando el adelanto de Ambito Financiero. Ese «gradualismo» significa que la alícuota sobre el cable llegaría a 14,5% en el 2001 y a 21% en el 2002. Desde enero de 1999 los abonos de televisión por cable tributan un IVA de 10,5% (no se les aplicó 21% por la presión del monopolio «Clarín»), alícuota que en realidad no representa recaudación para el fisco, ya que esos medios pueden computar a cuenta del impuesto los ocho puntos que pagan como tributo al COMFER. En compensación, según anunció ayer Carlos Chacho Alvarez, el gobierno estudia comenzar una reducción en el impuesto sobre los intereses al endeudamiento que toman las empresas, un polémico tributo creado por Roque Fernández. Dentro de una reforma tributaria que se debatiría en paralelo con el presupuesto nacional el gobierno incluiría el proyecto anunciado por Miguel Bein, secretario de Planeamiento, por el que se autorizaría a deducir del Impuesto a las Ganancias a las cuotas que se pagan por los créditos hipotecarios. Un día antes de la presentación del proyecto de presupuesto nacional para el 2001, Machinea confirmó, además, que la reducción presupuestaria será de «alrededor de 700 millones de pesos». También quedó en claro que el proyecto no incorporará recortes en las áreas sociales, ni tocará más los salarios o la estabilidad de los agentes públicos. Como novedad, anoche el oficialismo discutía un ofrecimiento del PJ para incorporar al presupuesto del 2001 un artículo por el que se deroga el bloqueo fiscal, pero sin efecto retroactivo. Esta sería una de las medidas para destrabar el conflicto que se generó cuando el Senado eliminó el artículo que derogaba esa disposición y que el gobierno había pedido en la ley antievasión. «El presupuesto no incluirá recortes del gasto social, ni de los salarios ni del personal del sector público», dijo ayer Machinea. Con esa frase quedó en claro que el ministro había obedecido la orden presidencial de no avanzar sobre las partidas de los ministerios «sociales»: Trabajo, Acción Social, Salud y Educación. «Hemos reducido a la mitad el déficit fiscal, y el nuevo proyecto de presupuesto que presentaremos mañana al Congreso nacional seguirá en esta línea, con una reducción adicional del gasto de alrededor de 700 millones de pesos, por primera vez en muchos años», explicó ayer el ministro. Con ese recorte el gobierno interpreta que se cumple con la Ley de Convertibilidad Fiscal fijando un límite de déficit para el año próximo de $ 4.800 millones. También se daba como un hecho ayer que el recorte mayor caería sobre los ministerios de Defensa, Infraestructurra, la SIDE y la Presidencia. Cada una de esas áreas sufriría una poda de sus partidas de entre 13% y 15 %, siendo el recorte en la SIDE superior a los $ 30 millones. Anoche el gobierno seguía debatiendo los últimos retoques al presupuesto del 2001. Por lo pronto, si bien se anunció que el presupuesto sería presentado hoy a las 20 en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, todavía quedaba en suspenso la realización de la reunión de gabinete, postergada desde el martes pasado, momento en que todos los ministros deberán firmar el proyecto definitivo.

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