En cuatro minutos Mitre liquidó a Atlético y llegó a la final

Los de Rocamora golearon al Decano por 3 a 0 y definirán el torneo frente a su clásico rival. Entre los 17 y los 21 de la segunda etapa Mitre sacó dos goles de ventaja y quedó con un hombre de más. La ilusión es poder llegar al Argentino B [su_note note_color=»#cdcdcd»]Atlético tuvo cuatro minutos fatales y así quedó afuera del Clasificación. Mitre cambió la actitud en la segunda etapa y por eso ganó merecidamente el encuentro[/su_note]Tan sólo cuatro minutos le bastaron a Mitre para doblegar a un duro rival como lo fue Atlético Posadas y así conseguir su pasaje para disputar la final del torneo Clasificación de la Liga Posadeña de fútbol. Y es que, entre los 17 y los 21 de la segunda etapa, el equipo de Carlos «Tuti» Boede consiguió dos tantos y, como yapa, el Decano se quedó con un hombre de menos por expulsión de Pablo Christín. Finalmente los del barrio Rocamora se llevaron la semifinal por 3 a 0 y así deberán enfrentar a Guaraní en la gran y esperada final para determinar qué equipo acompaña a Tigre en el próximo Argentino B. PAREJOS Y ABURRIDOS Al principio se dio la lógica, mucha marca en el medio, pocos espacios para los dos creadores (Alfonso por Mitre y Olivera por Atlético) y el acelere propio que genera el nerviosismo de dos equipos que saben que no hay posibilidad de cometer errores. Dentro de ésta lógica ambos mostraron la saludable actitud de querer tocar el balón por lo bajo y llegar a las áreas con jugadas combinadas. Pero claro, mientras Atlético, con jugadores más propensos a ese juego, buscaba herir por la izquierda en dónde Ibáñez, Holz y Caballero no encajaban en la marca, Mitre no lograba hacer que la pelota le llegara a los pies a Alfonso y éste quedó impedido de la creación. Así los minutos fueron pasando sin jugadas de interés. Recién a los 20 Atlético logró materializar en llegadas su mejor manejo, pero tanto el remate de Sanabria, como el posterior cabezazo de Runke, significaron poco peligro para el Choco Rodríguez. Luego de esto el local comenzó a mejorar lentamente y así tuvo un par de oportunidades para marcar. La más clara fue un cabezazo de emboquillada de Lobato que se fue por el segundo palo cuando superaba la estirada del arquero visitante. Después probó Olivera desde lejos con un remate que besó el palo izquierdo del arco local. Y, sobre el final de la etapa llegó lo mejor del primer tiempo. Primero lo tuvo Mitre con un cabezazo en la salida de un corner del Pulga Correa, que Servián contuvo de manera espectacular. Luego Atlético contestó con una buena jugada de Sosa en el área rival. Le llegó la pelota pasada, la levantó de sombrero ante la marca de un defensor y, antes que el balón toque el piso, le dio duro, pero su remate fue devuelto por el travesaño. Fue lo último de la primera parte, en definitiva sirvió como para que los hinchas se ilusionen con unos 45 minutos de mejor fútbol, y de goles. Y, SI LO DEJÁS, TE LIQUIDA Como si lo que necesitaba Mitre para ganar el partido fuera tomarse unos minutitos de descanso, luego de los quince del entretiempo salió hecho una tromba, con renovados bríos y con el manejo de Alfonso, que ahora sí comenzó a encontrar espacios. Atlético empezó a flaquear en defensa, Sanabria se encontró muy solo en la marca en el medio y Mitre se fue sobre el arco de Servián. A los cinco Gómez, con superioridad numérica, prefirió probar al arco antes que abrir para Alfonso que llegaba sólo y su remate fue bien contenido por el uno rival. A los diez otra vez Gómez frente al arco, pero esta vez su remate se fue a Encarnación. A los quince el que probó fue Ibáñez desde lejos y otra vez el arquero la mandó al corner. Y bueno, era lógico, de tanto ir y de tanto equivocarse Atlético, era previsible que ocurriera lo que ocurrió a los 17. Le pifió Christín en el despeje, la pelota derivó para Gómez por izquierda, éste mandó el centro, la peinó Lobato para que Alfonso ingrese sólo por la izquierda para mandarla adentro. Justo y merecido. Allí se terminó el partido, o mejor dicho, allí empezó a terminarse la resistencia de Atlético, que, en cuatro minutos, tiró abajo todo el esfuerzo de la ronda Preliminar. A los 20 y como si el error en el gol le hubiera dolido en el alma, Pablo Christín decidió descargar su bronca contra un rival y le pegó un codazo a Lobato. Al árbitro Trinidad lo vio y le mostró la roja. Pero los males de Atlético no terminaron allí, un minuto después fue Servián el que cometió un grueso error. Ibáñez pateó hacia el arco un leve tiro libre que fue directo a las manos del arquero, éste prefirió arrojarse espectacularmente que asegurarla y la pelota se le escapó. 2 a 0 y todo liquidado. Después todo giró entre en el vértigo en ataque de Mitre con la velocidad que le dio Boede con los ingresos del Atómico Sabaski y de Scatolaro y el nervisismo y el empuje obligado de Atlético. El Decano tuvo el descuento a los 32 con un penal que Runke primero convirtió, pero que el árbitro hizo patear nuevamente por invasión de zona. Allí surgió toda la figura del Choco Rodríguez, se arrojó para el mismo lado que en el primer lanzamiento y se quedó con la última ilusión decana. Después Scatolaro se perdió dos buenas posibilidades de alargar el marcador. De todas formas, y con seis minutos de alargue, el tercero lo convirtió Sabaski luego de que Servián le tapara un mano a mano. Allí el árbitro dijo basta y se desató el enloquecido festejo del grupo de jugadores de Mitre que le entregaron la victoria a su gente. Fue justo y merecido por lo realizado en la segunda parte. Ahora viene Guaraní, con todo lo que eso significa y con todo lo que hay en juego: la clasificación al próximo Argentino B.