Mitre ganó y llevó la serie a un definitivo encuentro

Los auriazules vencieron a Tokio por un tanto de diferencia (57 a 56) y ahora la final se definirá con un tercer partido. El encuentro fue de bajo nivel, pero muy luchado y vibrante
Sufrido, luchado, definido en los instantes finales, como toda final que se precie y en donde se miden, no sólo los dos grandes candidatos al título, sino, además, los archirrivales de siempre. Así fue la segunda final entre Mitre y Tokio en la categoría juveniles de la Liga Provincial de básquet. La victoria fue, finalmente, para los locales, que ahora estiraron la serie por el título a un tercer y definitivo encuentro a disputarse en la cancha de los orientales. FRICCIÓN El primer tiempo fue muy friccionado y la falta de precisión fue el rasgo prominente de todo el parcial. Es más, a los diez minutos, el marcador registraba un escueto 10 a 10. Claro, todo eso tiene una explicación. Por el lado de Tokio falló Tuno Abraham en la conducción (al igual que marró en los lanzamientos) y por eso muy pocas veces sus compañeros pudieron quedar bien posicionados ante el aro rival. Asimismo Mitre jamás pudo imponer todo el peso ofensivo de sus grandes pivotes. Un poco fue por culpa de la buena marca de la defensa de Tokio, pero también se debió al gran nerviosismo que se apoderó de los protagonistas del espectáculo. Así la primera etapa pasó sin pena ni gloria, sin dominios claros y, lo que más preocupó, sin un básquet que hiciera suponer que el espectáculo podría mejorar. Pero claro, se trataba de una final y la cuota extra de vibración estaba asegurada. PARECÍA DE TOKIO En la segunda parte las cosas asomaron mejor para la visita, que lentamente comenzó a estirar la escueta ventaja. Tuno se soltó un poco más y Gargantini empezó a aportar tantos, al igual que Pimenta. Todo indicaba que los orientales se quedarían con la segunda final y con el título, y es que, a tres minutos del final, el 50 a 45 a su favor ya parecía irreversible. Además ambos equipos ya habían superado el límite de faltas y cada infracción llevaba a los equipos a la línea de lanzamiento. Pero los dos equipos estuvieron sorprendentemente erráticos en simples y así el marcador fue sufriendo leves cambios. Hasta que Macias clavó un triple, achicó las diferencias y, luego de una serie de cuatro libres, de los que Mitre embocó sólo uno, igualó el marcador en 52. Y así fueron, libre a libre, tanto a tanto, finalmente Gargantini erró uno de los suyos y Mitre se encontró con la victoria que tanto deseaba y necesitaba. Ahora habrá tercer partido (es probable que se dispute el lunes) y allí sí, uno festejará y el otro se quedará con las ganas.